¿Que ocurrió anoche?
Un temblor estremeció nuestra cama, un temblor nos azotó desde el sueño
¿Fue tu cuerpo sobre el mío? ¿Fueron nuestros cuerpos agitándose?
Entre sueños e ideas divagantes, me estremecí como el martilleo de olas contra el puerto, con tus palabras, al parecer, abrí los ojos para penetrar en plena oscuridad, entre las sombras pude divisar tu rostro, tus cabellos esparciéndose en la almohada, sentir tus piernas entrelazadas a la mías.
Pero ¿qué nos despertó? ¿fue tu aliento sexual rozando mis mejillas? ¿ fueron tus manos rozándome el pecho? fue un temblor en mi cuerpo ¿que fue lo que nos despertó?
La textura tibia de tus sábanas me mecían erógenamente, y tu deslizando las yemas de tus dedos en mis antebrazos, remecías sueños juveniles de vigores y potencia, y sucumbía con el vientre ardiendo al contacto de la piel erizada de tu espalda, ese es mi temblor......pero ¿Qué nos despertó?
Hoy frente a mi computador me convenzo de que no fue mi cuerpo, ni movimientos telúricos, lo que nos despertó.
Amor mío fue la fuerza contenida entre el pequeño espacio apenas visible de nuestros cuerpos, lo que sacudió esta tierra.
No fueron ni mis sueños, ni los tuyos, fue la fuerza, la energía vital que emanó de nuestros cuerpos, no sólo fue sexual, fue el terremoto de vida que habita dentro de ti y de mi, es ese movimiento terráqueo que nace cuando estamos juntos, es esa potencia desenfrenada que nació entre nosotros para apoderarse de este planeta y construirlo de nuevo entre nosotros.
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