13 febrero 2006

Segunda, 13 de febrero, Adiós Arraial

Tomamos nuestro buen desayuno, como cada día con jugo natural de naranja, yogurt, frutas (mango, piña, bananin) su buen sanguchito de jamón queso, quequitos de muchos sabores, a la Ale le gusta mucho el de chocolate, hay otro húmedo como de coco que me gusta a mí.
Bueno y su rico café verdadero, con leite. Nos estamos mal acostumbrando a estos desayunos abundantes y deliciosos. Luego en la habitación cerramos maletas para decir adiós a Arraial.
Nos vamos a la placita a esperar el bus a Buzios pero un señor nos recomienda ir a tomar a Cabo Frío, que pasan más seguidos, así que abordamos un auto del pueblo que funcionan de colectivo y por $2,4RS nos vamos a Cabo al rodoviario (antes de ello la Ale consultó con un taxista por el viaje a Buzios y le vio la cara de turista y le pidió $80 RS, la Ale ni loca).
En Cabo el bus pasó a las 11:40 y por otros $2,4 RS llegamos finalmente a Armaçao de Buzios, y sin mayores problemas llegamos a la Casa Das Pedras, pousada donde anteriormente había alojado la Ale cuando vino en el 2001, un poco cambiado está todo, ha crecido este pueblito, gracias al turismo, hasta un Mc’Donald llegó, que le quita encanto, pero no falta quien prefiera la comida chatarra antes que una exquisita gastronomía brasileña.
Los taxis son utilitarios, puras cacharras y fuimos a Joao Fernández, todos aquí son argentinos, el taxista nos cobra $2 RS c/u…….. mmmmmmm ………….sin vergüenza, pero ya lo eran hace 5 años atrás.
Nos instalamos en una sombrilla dispuestos a pagar el consumo (pido una cerveza, me traen una Antártica) pá’ nunca más, me salió $5 RS.
El agua es super rica, pero entre puchos argentinos, mates y el raquitismo, logramos zambullirnos como en un lago.
La vuelta la hacemos en taxi acuático por $7 RS c/u, nos lleva un tramo mar adentro UF!! Buenas olas, una negrita se asusta, la Ale se asusta y yo me agarro al bote (véase la foto) con un rictus de muerte, disfrazo el terror con una mueca eterna. Finalmente llegamos a puerto y en la bajada nos topamos con un par de huecos (el Pelao y el Gordo) a los cuales veríamos en repetidas veces, en diferentes lugares de Buzios. Caminamos por la costanera y yo a la usanza brasileña me saco la polera para exhibir sin miedo mi flaccidez. Volvemos a la casa porque mi vejiga necesita una tregua. Nos damos una ducha y salimos, literalmente aplanamos las calles. Hay tanta tienda y venden tanta weá que uno se marea, desde lo más cuma hasta lo más top, se encuentra de todo, o casi (no veo muchas tiendas de electrónicos). Ya es de noche, nos da hambre, tomamos Nº en la pizzería y somos felices, quedamos chatos con el frango y el catupiry y los ojos del Jefe son felices, tamos OK. Nos vamos a la cuna a dormir hasta el día siguiente. Entre cotizaciones de tour a Río nos encontramos con Javier Jara, compañero de oficina del Jefe, nada peor que ir de vacaciones y encontrarse con compañeros de trabajo.

12 febrero 2006

Domingo, 12 de Febrero

Hoy por fin nos comunicamos con la ENTEL Card, el problema era que con el sueño del día Lunes, la Ale no recordaba bien la clave (25XX).
Salimos de compras, poleras lindas de Arraial, queremos disfrutar el último día. Musculosa a $10 RS, musculosa de Ale $8 RS.
Aprovechamos de pagar la pousada $504 RS x 7 días + 2 Aguas Minerales.
Como despedida subimos el Morro de Atalaia otra vez (pero por el atajo) y fuimos a As Prainhas, pero hoy está frío y las corrientes del Atlántico traen a las medusinhas que nos invaden.
No hay nadie metido en el agua, nos damos un pequeño chapuzón y caen unas gotitas de lluvia. Aprovechamos de dormir la siesta, no queda otra, y comer bolinhas $2,5 RS, es como una papa rellena, super rica y los pasteis son como empanadas. Los zancudos han hecho festín con nuestras piernas, compramos espirales de humo, pero al parecer no los espantó a todos.Dejamos las maletas listas para el otro día, llegar y partir.

11 febrero 2006

Sabado, 11 de Febrero, Las Prainhas

Como hoy iba a llover decidimos, decidimos hacer la ruta a pie del Pontal de Atalaia. Pero no hubo ni lluvia ni nubes, así que literalmente mojamos la camiseta y parecíamos que estábamos en un sauna.
A mitad del recorrido nos dimos cuenta de un atajo, pero ya era demasiado tarde. Cuando llegamos a "as Prainhas", tuvimos la gran recompensa. El agua es exquisita. Al igual que cuando fuimos por primera vez a Forno, esta playa llenó nuestras espectativas, era más exclusiva, de muy difícil acceso ( si no pregúntennos), agua transparente y suaves olas.
Aquí pasamos la tarde bebiendo minerales y Skol y comiendo bolinhos. La verdad no me dan ganas de irme de acá y creo que voy a extrañar este lugar.
La vuelta a la casa fue más movida, nos ofrecen llevarnos y nos fuimos en el pick-up de una camioneta, íbamos como en Fantasilandia, nos bajamos en el atajo y de ahí a patita pa' la casa. Todo esto sin antes de uestro respectivo "Muito Obrigado".
Cuando llegamos el Jefe mostró señales de una alergia, así que tomó unos antihistamínicos que la hicieron dormir como un tronco, respiraba por arriba y por abajo.
Despertó como a las 23:00 por su chiquitolina y siguió, yo aproveché de hacerme un poco más nativo y me lancé a ver TV, taban dando "El Padrino"...jejeje.., y luego sueño, lluvia y zancudos, hasta el otro día.

10 febrero 2006

Sexta, 10 de Febrero, Las Medusas


Hoy tomamos un paseo en barco ("diosa Griega"). El paseo fue bien desinflado, fuimos a Forno, pero no bajamos y ahí empezó todo, las medusas. Amebas les dice El Jefe, "Aqua Viva" les dicen los brasileños. La Lae chapoteó pero luego con las amebas...nada más. De ahí nos fuimos a "As Prainhas", tampoco bajamos y de nuevo las medusas. Luego fuimos a la Gruta Azul y nuevamente vemos las medusas, bancos de medusas, parecen la maldición de fin de siglo. Volvemos a Praia Do Farol, en la isla Cabo Frío (o isla Do Farol), reserva de la estratósfera o algo así, bajamos en un bote y nos damos por fin un chapuzón y nuevamente ahí las medusas wevian.....Regresamos a tierra firme con la sensación de querer más, agotados de tantas medusas y de tantos Ché (el bote va lleno de argentinos).
Decidimos volver a Forno, la playa fetiche, a darnos un chapuzón, aunque el pronóstico del tiempo diga "chuva", vamos igual.
Cuando llegamos obvio las "amebas" nos esperan, han armado un concierto de rock y está lleno de ellas, tanto así que un kayakista nos muuestra el caracho inflado y quemado por una de ellas, en Brasil las cosas son a lo grande.
Esperamos un poco desilusionados y vemos a unos pescadores con redes, la Ale toma fotos y sale casi el océano entero en la red.
La segunda vez nos quedamos a mirar y no aguanto y meto las manos, soy un pescador más (y me acuerdo de la canción:

"Tú has venido a la orilla,
no has buscado,
ni a sabios ni a ricos..."

De pronto entre tanto grito de los pescadores escucho -"TARTARUGA, TARTARUGA", y me acuerdo de las clases de portuñol de la Ale. Si, es una tortuga marina y como cabros chicos nos tomamos fotos con ella. Es tal vez una oportunidad que jamás volveremos a tener.
La Tartaruga es devuelta al mar y a su vez nos devuelve la alegría amargada por el trip en la Diosa Griega y por las cochinás de medusas.
Para terminar adivinen que salió entre las redes de los pescadores...saquen sus propias conclusiones.
Para agregar al pié de página: Otra vez con lentes oscuros nuevos y nos subimos a una higuera de 100 años.

09 febrero 2006

Quinta, 9 de Febrero, La lucha de las Brújulas

Me cuesta tanto despertar por las mañanas, yo entiendo que hay que aprovechar el día, pero entro en conflcito con mi sueño (como nunca tengo sueño, quiero aprovecharlo). Por la mañana vamos a Prainha (va con cola de porky al final, pero no me salió con este teclado). Ta' pegando juerte el care' gallo y empieza la guerra de las brújulas, -"no si es para allá"-, y respondo-"que no , que es por allá"-, y luego viene el -"pregúntale a esa persona"-, y yo que sólo atino en inglés le respondo -"no si es por allá"-, haciéndome el loco.
Hasta que llegamos y partimos a bañarnos, pero no es como Forno.
Volvemos y pasamos al super, todavía el care' gallo está encima y la consigna es perseguir cualquier sombra que exista. Almorzamos de a kilo y rematamos con una siesta que hace mucho no teníamos.
Cuando despertamos partimos a Praia Grande. Nuevamente nuestras brújulas se enfrentan y aparecen las mismas frases de la mañana. Nos paseamos por todo el comercio que no habíamos visto. Yo me pongo mi traje de Jesús y aplano las calles, como si fuera un calvario, las patas me arden con las chalas.
Por fin llegamos y cachamos que es el paraíso del surf. Miramos un rato y pa' variar se arma una pichanga.
De vuelta al hogar nos topamos con Blanca Lewin.
De tanto andar traspaso mi cruz al Jefe y acepto su oferta de zapatillas acuáticas.
Compramos souvenirs (son poleras para los niños) y llegamos a Praia Dos Anjos. Cachamos que a esa hora se pone medio califa el asunto, así que un chapuzón y pa' la casa.
Tomamos once y en la noche las brújulas se enfrentan nuevamente.....Angra o no Angra?

08 febrero 2006

Quarta, 8 de Febrero, Cabo Frío

La ruta nos dice trocar dólares. Nos zampamos el café de manha y nos vamos al paradero para irnos a Cabo Frío. Como aquí hay realismo mágico, en vez de irnos en bus, pasa un gallo y nos hace señas y nos vamos en una especie de colectivo particular, el tipo igual se hace sus monedas. Cambiamos dólares y nos vamos a recorrer, la estrella del día es el bolso playero de mi Jefe. La promoción de Ariel terminó por ser una farsa y la mierda de bolso se va cayendo a pedazos sóla.
Entremedio tengo mi zungao como cualquier nativo y con la Ale aplanamos el centro de Cabo Frío (yo creo que la gente se aburrió de mirarnos). Las cosas del destino, cuando ya pensábamos que el Bolso Ariel se salía con la suya, ocurrió el milagro...en una calle cualquiera aparece el bolso y nos ponemos contentos. La Ale termina por pisotear y tirara a la basura su bolso superstyle Ariel y nos vamos a almorzar comida verdadera. En eso llegan unos rotos chilenos arrasando conel buffet. De ahí todavía nos quedan piernas para la playa y nos pegamos varios chapuzones antes de volver en un bus que más se parece a una Matadero Palma, por la cantidad de paradas que hace en el camino, y la vieja loca que le grita a la Ale diciendo que se tiene que bajar y hacer la fila, cuestión que por cansancio decidió saltarse, sabiendo que yo le pagaría el pasaje, nunca tan deshonestos. La micro nos llevó por otro camino, con más comercio y más bullanga, creo que estamos super bien ubicados en Suiá.

07 febrero 2006

Tercera, 7 de Febrero, Arraial Do Cabo

Muito obrigado!! Obrigado, obrigado, para todo obrigado. Obrigado suena a abrigado y la paradoja es que todos andan en pelotas. Los hombres con zunga o zungao y las mujeres con una estampilla ahí y un hilo por detrás. Guatonas y raquíticas, viejas y cabros chicos. Aquí el calor te hace andar pilucho. Hasta yo me empilucho, pero mi traje de baño parce de un buzo. Vamos a Praia Do Forno, nos queda super cerca y es ......el paraíso, la Ale me dice -"me quiero quedar todos los días aquí"- nos metemos 20 veces al agua, la felicidad no cabe en nosotros, imaginen la playa ideal, bueno eso es Forno. Lo malo es que en esta sesión playera la Ale entendió lo que era ser un pollo rostizado. Lo bueno fue que tenemos lentes oscuros nuevos, jejeje son Reef.
Cuando volvíamos a la casa, las tripas aullaban. Fuimos al super, compramos agua, pan, tomate, jamón (presunto) y guaraná, nos zampamos todo. Para poner el broche de oro, les tengo una historia en dos partes.
1.- Decidimos quedarnos hasta el Domingo, y nuestro negociante oficial consiguió una rebaja de 4 RS por día, no es malo.
2.- Después de eso mi ataxia se hizo presente y sobre la misma hice añicos un vaso de la posada, como para celebrar no creen?? lindo no??
Para terminar las comunicaciones son paradójicas también, logran el efecto inverso, todavía estamos incomunicados con Chile, la tarjeta entel no sirve.

06 febrero 2006

Segunda, 6 de Febrero, Río de Janeiro, Rodoviario


Finalmente Rodoviario Novo Rio. La verdad esto asusta, demasiadas caras nuevas, caras desconocidas, que me producen desconfianza. No cacho el portugués e intento defenderme como gato de espaldas. La Ale me plantea desafíos y me manda a comprar una milanesa, yo pongo mi sonrisa arrendada y funciona, salvamos el almuerzo.
Nos damos una vuelta por el Rodoviario y no aguanto el calor, me saco la polera regalona, nimporta que me vean los rollos o las espinillas en la espalda.

Lunes, 6 de Febrero, Aeropuerto de Santiago


Después de la rápida intervención de TURTRANSFER (gracias muchachos, no destiñan),
arribamos a la sección de embarque. Personas de 1,30mt. nos esperan en tenidas deportivas y lenguaje centroamericano (oye chico, parece que viene de un torneo de futbol). Después de deambular entre los asientos, si no es por el tipo que sella las maletas, no nos embarcamos a tiempo. Fue la voz salvadora, -"caballero en qué línea viaja"-, -"en Varig"- respondo, -"es esa fila de allá"-. Cuando nos volteamos a ver, la fila era más larga que la cola del pan. Hacemos la fila y la Ale intenta escabullirse en la fila de clase ejecutiva, buen intento, pero no resultó. Una vez listo el embarque me recorre la cosquilla en el estómago, ya quiero subirme, me carga esperar, pero antes está la tarjeta Entel. La idea que no me gustaba, terminó por convencerme, igual voy a ser beneficiario de ella. Cuando estamos OK, nos dirigimos a polizei internacional (siempre me ha dado una sensación extraña el pasar por ahí). El tipo me mira, yo no lo miro, teclea algo y revisa mi pasaporte, yo sólo miro sus manos, en la mitad de un segundo, finalmente nuestros ojos se entrecruzan y siento la mirada de la ley atravesándome y me hace recordar todos mis ilícitos de ciudadano, incluso los peores. Están llamando a embarcar.