11 febrero 2006

Sabado, 11 de Febrero, Las Prainhas

Como hoy iba a llover decidimos, decidimos hacer la ruta a pie del Pontal de Atalaia. Pero no hubo ni lluvia ni nubes, así que literalmente mojamos la camiseta y parecíamos que estábamos en un sauna.
A mitad del recorrido nos dimos cuenta de un atajo, pero ya era demasiado tarde. Cuando llegamos a "as Prainhas", tuvimos la gran recompensa. El agua es exquisita. Al igual que cuando fuimos por primera vez a Forno, esta playa llenó nuestras espectativas, era más exclusiva, de muy difícil acceso ( si no pregúntennos), agua transparente y suaves olas.
Aquí pasamos la tarde bebiendo minerales y Skol y comiendo bolinhos. La verdad no me dan ganas de irme de acá y creo que voy a extrañar este lugar.
La vuelta a la casa fue más movida, nos ofrecen llevarnos y nos fuimos en el pick-up de una camioneta, íbamos como en Fantasilandia, nos bajamos en el atajo y de ahí a patita pa' la casa. Todo esto sin antes de uestro respectivo "Muito Obrigado".
Cuando llegamos el Jefe mostró señales de una alergia, así que tomó unos antihistamínicos que la hicieron dormir como un tronco, respiraba por arriba y por abajo.
Despertó como a las 23:00 por su chiquitolina y siguió, yo aproveché de hacerme un poco más nativo y me lancé a ver TV, taban dando "El Padrino"...jejeje.., y luego sueño, lluvia y zancudos, hasta el otro día.

No hay comentarios.: