Una respuesta a nuestras acciones?
Será Dios que está metiendo la mano?
Desde Chile creo que no logramos agradecer el privilegio de tener una lluviecita de mierda, simpática al fin y al cabo, deja sus heridas, pero finalmente incomparable con lo pasado en New Orleans.
Cuándo nos vamos a sentar (al menos frente al espejo, para no esforzarse tanto) y mirarnos bien el ombligo?
Hermanos negros, no saben cómo me duele verlos en pantalla, no se imaginan cuánto me duele, en todo caso incomparable con al menos un segundo de dolor de uds.
Suerte hermanos, black power.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario